29 de juny del 2007

¿Por qué no hay que meter la mantequilla en el microondas?

No sé si os habrá pasado que un día os levantáis con unas ganas de prepararos unas tostadas olímpicas. Así que vas a la despensa coges el pan de sándwich, pones un par de rodajas en la tostadora y la enciendes. Bien, ahora el fundamento: vas a la nevera y te haces con la mermelada y la mantequilla y en el cajón está la espátula. Mientras tanto se oyes el “clin” de la tostadora, ¡ya están listas! Las pones en un plato, lo pillas todo y te diriges a la mesa. Lo primero la mantequilla, la destapas y con la espátula le pegas viaje pero poco más y te partes la mano en el intento, la cabrona está congelada. Algún inteligente con la excusa de que es verano la ha puesto en la nevera y ahora está imposible de untar.

Pero esto solo es la punta del ice-berg de tus problemas. Ahora toca como descongelarla. Se te cruzan varias ideas, como dejarla en la mesa, ponerla al sol, pero piensas que todas van a tardar mucho tiempo, tu tienes hambre, ¡y quieres comer ya! Pues te vas al micro, no te molestas ni en reducir la potencia del mismo, qué más da, tu intención es dejarla unos segundos, lo justo. Abres la puerta, metes la mantequilla, cierras y enciendes. Ahora por alguna extraña razón te empanas, será que te acabas de levantar y por un instante vuelves a tu letargo, hasta que otro “clin” te vuelve a la cruda realidad: ¡el micro! Abres la puertecita y tras una humadera blanca se encuentra la mantequilla, o lo que queda de ella. Apesta a mierda, y cuando consigues sacarla de ahí dentro sin quemarte, haces un descubrimiento: ¡la mantequilla hierve! Se oye el “pluf-pluf” de las pompas al estallar y que esguitones ¡leches! Peor que un huevo frito.

¿Y ahora qué? Esa cosa ya no es comestible, se ha vuelto líquida y no solidifica y encima huele mal, y ¿a qué huele? Pues a mierda, y ¿dónde va la mierda? Al retrete. Tan pancho como decidido la hechas al water. Aquel traga y no se queja, huele a lo de siempre y se lo lleva sin protestar. Al final te quedas con las ganas de las tostadas, pan y mermelada se queda cojo, a la próxima quizás te decantes por dejar la manteca un rato al sol.

6 comentaris:

Oyros ha dit...

A ver, por partes.

¿Tú no dices que ves a Arguiñano? Pues el otro día dijo cómo untar la mantequilla recién salida de la nevera: coges un cazo con agua y la pones a hervir. Cada vez que quieras coger un poco de mantequilla, sumerges la punta del cuchillo en el agua 2 ó 3 segundos. No hará falta más. Verás que fácil.

Segunda cosa: Nunca, nunca, nunca, tires aceites por el retrete. Esto incluye la mantequilla derretida que no es más que grasa. Solución: a la basura. métela en una bolsita de plástico, si quieres. Con lo aceites lo que se debe hacer es meterlo en una botella de plástico, cerrarla y tirarla al plástico.

Unknown ha dit...

jajaja, açò no em va ocorrer a mi. I encara que veig Arguiñano... t'ho acabes d'inventar o de veres ho va dir?

Oyros ha dit...

T'ho jure. Per a traure unes boletes de mantega, sumergia una ferramenta metàlica en aigua calenta uns instants i la mantega eixia perfecta.

Anònim ha dit...

Que fuerte Fuertes!!! tuviste la brillante idea de meter la mantequilla en el microondas...no pensaste k se desaría toda..o si está e un recipiente de plástico éste se fundiría... tienes ideas de bombero!!
Aunque la situación debió de ser graciosisima...jajaja

Lna!!

Maite ha dit...

XDDDDDDDDDDDD, ets de lo q no hi ha jejeje.

A mi tmb me va passar lo de la mantega, fa anys jejeje. Tmb me va passar algo paregut amb la tomata, m´he vaig quedar empanada i la tomata pareixia un volcà en erupció, a lo stuff XD.

Oyros té raó,sino mira lo q fan quan te posen la bola de gelat.

B7s!

Unknown ha dit...

I jo que pensava que als gelats ho feien per a esterilitzar la ferramenta.... jajajajajajajaja ;)

A mi açò no em va passar, va ser a un dels meus germans... i quan m'ho contà me pisava de la risa, jajajaja. Que fort XD.